Esta noche estarán todas las luces encendidas.
Porque es Nochebuena. Y porque estarán todas las felices familias reunidas pasándolo pipa! Sí sí... súper pipa.
Conversación que puedes escuchar en cualquier supermercado o tienda en estas fechas:
"Viene mi hermana con Jose y los 3 niños; mi hermano con Lola y sus 2 perros; mi cuñada Mari y Paco con mi madre que les pilla de camino, y su cuidadora ecuatoriana y la hija que ha venido a verla por navidad; mi prima Merche y el novio se traen a sus padres también porque se quedan solos y son muy mayores; y la hermana de mi marío que se acaba de separar y la pobre, con dos niños y embarazá, no se va a poner a cocinar, la pobre, y trae a su novia, que se ha echado a lesbiana...
Este año me ha tocado a mí.
Bueno, siempre me toca a mí...
Y es que claro, mi hermana tiene una casa muy pequeña, mi hermano vive muy lejos de todos, mi cuñada está ahora sin trabajo y no le vamos a hacer el gasto, la ecuatoriana no es de la familia, mi prima vive con el novio en la casa de los padres de él. Y la hermana de mi marío es una guarra que nadie quiere ir a su casa a comer y menos ahora que tiene novia.
Por eso siempre me toca a mí."
"Somos los que andamos mejor económicamente, tenemos más espacio, más tiempo para los preparativos, y vamos, que siempre me toca a mí.
Así que desde Noviembre estoy de compras. Que si los langostinos de aquí, la paletilla de allá, el queso del mejor sitio, el cordero lo encargas para el 24, el pavo para el 25, la merluza para el 31, y el 1 estamos ya todos hasta los cojones de comer y de vernos, y yo además, de cocinar para 21".
"Pues sí Mari, menudo invento este de la Navidad. En mi familia somos todos ateos y no nos podemos ni ver, pero claro, es navidad y hay que juntarse. ¿Nadie se ha parado a pensar en lo que significa la navidad? Pues se ve que no, y es llegar Noviembre, y ya estoy temblando. Por mí, se podían ir todos a donde amargan los pepinos, incluido mi marido, que para colmo, me tiene los dos meses protestando por tener que acompañarme a las compras. Que si "qué dineral", que si "luego ni lo agradecen", que si "y encima tenemos que comprarle un regalo a cada uno", que si "tu hermana es un coñazo y no la soporto y encima es de Podemos" y claro, entonces tengo que rebatirle yo con que "la tuya es peor que es de VOX y me aguanto"... En fin, todo paz, amor y felicidad en estas putas fechas tan entrañables...
Qué coñazo, qué gastazo absurdo, qué panzás de comer y de beber por cojones, ¡y qué hartura de familia!
El que inventó aquello de "Familia y trastos viejos, pocos y lejos", era un visionario.
Para colmo, con tanto cocinar, todos los años me veo el mismo 24 teniendo que ir deprisa y corriendo a buscarle un regalo a cada uno. Ya ves, que a la mitad no los veo en todo el año y no sé lo que les gusta, pero como hay que cumplir, pues venga regalos para todos. Un foulard para las mujeres, una colonia para los hombres, y juguetes para los niños. Las calles invadidas de gente agresiva corriendo, los coches pitando, los parkings llenos, las tiendas a reventar... Qué bonita es la navidad, sí".
Me apuesto el cuello a que si le preguntamos a 100 personas ¿Qué te gustaría hacer en nochebuena?, el 98% dirían: "Quedarme en casa en pijama como todas las noches, y cenar mi vaso de leche con galletas, en vez de tener que aguantar a mis cuñadas y a los coñazos de mis primos".
Pero ¡NO! Es Nochebuena, y hay que sacrificarse.
El otro 1% son los que de verdad se llevan bien con la familia y les apetece verlos, y el 1% restante los que hacemos lo que de verdad nos dá la real de la gana, que es no ir a ninguna parte a pasar una Nochemala.
Y esa lluvia de mensajes cursis de "paz, amor y felicidad" por whatsapp, de gente que no ves hace siglos, y otros que ni tienes en la agenda... Flipante. Y lo peor no es recibirlos, es que ¿qué les contestas?... Decirles "Igualmente" queda soso, pero es que más despliegue de deseos navideños no me sale. Ofú.
Y venga vídeos que te petan el móvil y que nadie ve (reconocedlo).
Maravilloso.
Y muy original todo.
Y esto no ha hecho más que empezar. Todavía nos queda el manido "Feliz año" del 31 y el "Que te traigan muchas cosas los reyes" del 5. Ea.
Y toooodos los años lo mismo.
¡Que ya tenemos una edad por dios!
Y ahí afuera, está a punto de explotar la tercera guerra mundial, pero como es navidad, hay un "alto el fuego"...
Señores, que la Navidad tiene un significado religioso que casi nadie parece recordar. Que el nivel de gasto al que estamos obligados, no hay quien lo soporte, ¡y el digestivo menos! Que no es necesario, que no hay que quedar bien con nadie, ni regalar por quedar bien. Que lo que de verdad da paz y felicidad, es hacer lo que te apetece hacer, les guste o no a los demás, que si tanto te quieren, deben entenderlo y respetarlo. Y que ya está bien de obedecer al Corte Inglés y a Amazon, que se nos ha ido la olla a todos del todo.
Bueno, a mí no. Yo me quedo en pijama con mi vaso de leche y mis galletas, en la mismísima gloria, desde hace muchísimos años.
En fin, como siempre digo, cada uno se amarga la existencia como quiere, o le dejan.
Pueden ir en paz.
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