¿Y si desaparecieran las mujeres?

Paco se levanta por la mañana, es tarde porque no ha sonado el despertador... ¡Ah no! Que no estaba puesto... Grrrr.

Va al baño a hacer pis, y no hay papel higiénico, ¡¡vaya por dios!!, ¡¡ni pasta de dientes!!... Se mete en la ducha, ¡¡Y NO HAY GEL!!... Madre mía, ¡cuánto contratiempo al mismo tiempo!, -pensó.

Bueno, y para colmo, ¡la toalla huele a perros muertos! ¡¡Pero bueno!! ¿¿Qué es esto??

"En fin, voy a ponerme unos calzoncillos y a desayunar" -volvió a pensar. 

Pero ni tenía calzoncillos limpios, ni calcetines en el cajón, ni había leche, ni café, ni magdalenas, ni nada para desayunar... 

Pensó desayunar en un bar, así que fue a vestirse, y al no tener ropa limpia, tuvo que ponerse lo mismo del día anterior, sudado, pero no iba a salir en gayumbos a la calle -pensó por tercera vez.

Bajó al bar, desayunó y se fue al trabajo andando, ya que no encontró las llaves del coche. 

Cuando volvió a casa a medio día, la comida no estaba hecha, ni la cama, ni el salón recogido. Las latas vacías de cerveza y los restos de la cena seguían en el mismo sitio donde los dejó. Y el suelo pegajoso. 

No había nada en el frigorífico, ni en la despensa.

Habitación de un soltero (y lo sabéis).

Se quedó parado, delante de la ventana, con los cristales sucios, pensando qué habría pasado...

No entiende nada, si siempre suena el despertador, hay papel higiénico y gel para ducharse. Y la toalla huele a Flor de Jazmín. Y hay café, leche y magdalenas para desayunar. Su ropa está limpia y planchada en el armario. Y las llaves del coche siempre están en la entrada...

No entiende nada.

Y a medio día, al llegar, la comida estaba en la mesa, y la casa ordenada y limpia. Y el frigo lleno de cosas ricas. Y en la despensa había patatas fritas y sardinas en tomate, patatas fritas de bolsa, ganchitos...

Y después de comer, los platos se metían por arte de magia en el lavavajillas, y el aceite de la vitro desaparecía solo. Y la lavadora se ponía sola, y la ropa se planchaba y colgaba en el armario sin que él se enterase...

Claro, va a ser eso....

Mi mujer se ha ido -pensó, con cierto esfuerzo ya.

Y se marchó...

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Nota del autor: No soy Feminista, aunque voy a acabar siéndolo. Esto no pretende ser una crítica a los hombres (maridos, parejas, hijos, padres, hermanos, sobrinos) apañaos, que haberlos, haylos (yo no los he catao, pero algunas dicen que los suyos si lo son). No os ofendáis si leéis algo que no os gusta, quizá sois de los apañaos y en ese caso, esto no va pa vosotros ;)

Pretende ser un homenaje y reconocimiento al trabajo diario de las mujeres en casa, aparte del que tengan en la calle y de los niños. Un reconocimiento a todas aquellas que están pendientes de TODO, de que no falte nunca de nada en casa, de que todos tengan lo que necesitan y les gusta, y que parece que es un trabajo que no cuenta, que se hace solo, y en la gran mayoría de las veces, no está valorado lo suficiente.

O mejor dicho, no está valorado nada.

Estaría muy bien cambiar los roles al menos una semana al mes, para que vieran aquellos que no lo valoran, que el tener a alguien pendiente de ti, que piensa en lo que te gusta, en lo que hace falta, en lo que te apetece, y que cuida de que todo esté bien, es algo que hay que cuidar y agradecer.

Porque las pilas se gastan. Porque las mujeres no nacemos con ese chip puesto ni nos vienen de serie las ganas de limpiar, cocinar y fregar, y no lo hacemos por obligación, sino por gusto (estoy mintiendo mucho), y estaría bien que de vez en cuando, se nos reconociera que, gracias a nuestra dedicación, el resto de la familia vive agustico, y no se dan cuenta de que se había acabado el papel del váter, porque ya hay otro rollo puesto. No tenemos seis brazos, aunque a veces lo parezca.

Tampoco pretendo adosar ni endosar a la mujer el papel de amantísima ama de casa (básicamente porque la mayoría no lo somos), no nacimos deseando hacer todo lo que hacemos, pero hay que hacerlo, y tristemente, si no lo hacemos nosotras, nadie lo hace.

Traemos ese papel impuesto por nacer mujeres, sí, es una pena.

Y la de cosas que podríamos hacer que nos gustan, en todo ese tiempo que empleamos en hacer cosas que no nos gustan, pero que alguien tiene que hacer...

Pensar en qué hacer de comida para que comáis de todo, es agotador!

Ir al supermercado no mola, acarrear las bolsas menos, colocar tampoco, cocinar menos aun, y lavar los platos después de comer, mientras todos se tumban a reposar, ¡¡nada de nada!!

Y qué decir ya de lavar y planchar la ropa (yo no plancho por eso mismo). No son actividades que nos apetezca hacer día tras día, ni siquiera nos gustan, pero las hacemos, por los demás, para que vivan mejor. Si por nosotras fuera, os aseguro que no haríamos ni la mitad de lo que hacemos, nos apañamos con menos de todo. 

Y si a cambio pedimos cariñicos, o que vengáis con nosotras a algún lao, o a veces tenéis que aguantarnos gritos de locahistérica, también podía ser que lo hicieseis por darnos el gusto, que tampoco pasa nada si de vez en cuando recibimos algo que nos gusta, y no me refiero a nada material.

Más que nada, para que sigamos teniendo ganas de seguir haciendo todo eso que hacemos y no nos gusta hacer, porque ya no estamos en los años 50, porque ya no nacemos para servir a los hombres, sino para compartir la vida y los quehaceres domésticos, que son de todos y para todos.

Y el que no ensucie, no se vista, no cague o no coma, se libra, pero todos los demás, reflexionad un poco, a ver si valoráis lo suficiente lo que esa mujer que tenéis al lado, hace por vuestro confort diario. Y dadle más besos, que no os cuesta ná, y hacedle la vida más cómoda también a ellas, que seguro, estando ellas más contentas, estaréis más a gusto vosotros. Hacedlo ¡aunque sea por egoísmo!, pero hacedlo. 

Es tan fácil como eso. 

Otro día escribiré las cosas que echaríamos en falta las mujeres si los hombres desaparecieseis de repente... Cuando consiga averiguar cuáles.

P.D.: Mientras escribía esto, mi hijo ha recogido la cena y ha fregado los platos ;) Y sin decirle nada. O es adivino, o me está saliendo bien su educación, o ha leído algo cuando he ido a hacer pis ;) 

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